¿Qué nos depara el futuro? – IV Parte

¿Podrá Panamá lograr un futuro brillante para su registro?

Hace unos días mientras había una sesión plenaria en la OMI en Londres, la Delegación Panameña viajaba a Londres, encabezada por el Administrador Jerry Salazar, y uno de los propósitos era el debut como Embajador de Panamá ante la OMI del Capitán Orlando Allard.

Ese día el Lloyd’s List engalanó su columna de “People and Places” dándole una grata y cordial bienvenida a Londres como nuevo Embajador Panameño, haciendo hincapié en sus extensos conocimientos, gran experiencia y magnifico récord laboral.

Realmente este “endoso” de un periódico internacional, el cual es leído por toda la industria marítima, a nuestro nuevo Embajador ante la OMI es algo que nos debe de llenar de orgullo y alegría, principalmente porque cualquier articulo o comentario positivo o reconocimiento de buena labor que la prensa marítima internacional le dedique a Panamá es un gran triunfo para el país.

Sin embargo, no todo acaba aquí, más bien empieza. La tarea del nuevo Embajador Allard no es fácil, sus días van a ser largos y recargados de muchas horas de duro trabajo y es fundamental todo el apoyo de parte de la AMP para cuando tenga que ponerse en pie en una reunión plenaria ante los ojos de TODOS los países miembros de la OMI a defender los colores de Panamá y así mismo poder demostrar y convencer al mundo que Panamá es un país soberano, con un registro soberano y líder mundial, y sobretodo con ánimos y capacidad para mantener esa posición.

En artículos anteriores se comentó lo que busca un armador de nuestro registro, hoy comentaré que necesita nuestro registro para poder “llevarse de calle” al usuario.

Quizás hagamos una comparación con una fábrica. Si Panamá en vez de registro de barcos, construyera los barcos, ¿qué debía hacer? Evidentemente debe comprar acero de la mejor calidad, debe tener instalaciones donde ese acero se pueda almacenar, debe tener astilleros para colocar sus instalaciones, salida al mar para botar el barco una vez esté terminado, debe de invertir en comprar todos los materiales de construcción de primera calidad, debe tener personal capacitado y que sepa hacer su cometido. Técnicos que sepan cortar las planchas de acero, debe imprimir panfletos y revistas para que el armador vea los productos que fabrica, debe ir a las convenciones y ferias internacionales y estar allí al lado de los otros competidores exhibiendo sus productos. Es decir, para construir sus barcos Panamá como astillero debe de invertir, invertir e invertir. Un producto final acompañado de un equipo humano y de una estrategia haría que Panamá vendiera barcos como pan caliente…porque de que se venden barcos se venden!

Pero la realidad es otra. Panamá no construye barcos, Panamá es un registro abierto y soberano. Por lo tanto que “fabrica” Panamá? Imagine el lector que el tesoro de Panamá recibe todos los años más de 40 millones de dólares en ingresos por abanderamientos y demás servicios relacionados a este renglón, y la industria de servicios relacionada a este renglón (abogados, notarios, etc) recibe como unos 100millones de dólares. Ambas son cifras muy conservadoras y necesarias para nuestro país, y nuestra próxima pregunta es: ¿Qué “fabrica” la Administración?, la Administración fabrica papel, sellos y libros, certificados etc., es decir, todo lo que necesita una nave para poder navegar, eso es por lo tanto el costo de nuestra materia prima.

Así como el astillero necesita instalaciones la Administración también, eso cuesta dinero.

Además Panamá necesita personal capacitado para poder tramitar esos “papeles” y documentos, otro costo. Panamá necesita estar en “todos” los foros internacionales, suma y sigue como dirían en contabilidad. Necesita que el armador y el usuario conozcan la bandera panameña y el servicio que presta, y sobretodo necesita un mecanismo automático e instantáneo para que cualquier situación imprevista pueda solucionarse de inmediato. Esas soluciones instantáneas cuestan dinero. Y son tan urgentes a veces esas situaciones, que la Administración no puede esperar, tiene que tener un fondo de reserva disponible instantáneo. Imagínese el lector que en el peor de los casos hay que salir a hacer una inspección de un accidente o hay que tomar una decisión de comprar un equipo o establecer un nuevo procedimiento, no se puede esperar ni tener obstáculos. Los funcionarios deben de tener todas las facilidades, medios y recursos a su alcance para efectuar sus trabajos a cabalidad. No se puede funcionar sin papel de telex o de fax, no se puede funcionar sin fotocopiadora, no se puede funcionar sin viáticos, no se puede funcionar sin computadora ni sin Internet, no se puede funcionar sin lápiz!

Comparemos por un instante el número de computadoras que tiene el Canal y el número de conexiones de Internet. ¿Cuántas tiene la AMP? Gran diferencia, ¿No es cierto? Pero acaso, ¿No es la misma industria sirviendo al mismo usuario?

La relación usuario-bandera, es muy importante, ya que por ejemplo, existe una necesidad imperativa que tienen las autoridades panameñas de asistir a las ferias internacionales con efecto de mercadear, de conocer las necesidades del usuario y de escuchar las criticas de manera imparcial que se le hacen a la bandera.

En base a esas criticas, hacer planes de posibles soluciones, hacer reformas a la legislación existente para hacer del registro panameño un registro más competitivo y útil a las necesidades del usuario. Hay que recordar que la última reforma fue en el 84 y estamos durmiendo en nuestros laureles mientras surgen como hongos, distintos registros abiertos que nos hacen la competencia casi todos los años. Hay que también incrementar el contacto y facilidad del servicio, un ejemplo es la creación de oficinas

representativas del registro a nivel internacional. No me refiero a los consulados, sino a oficinas técnicas como SEGUMAR que son las que mayor contacto directo sostienen con el armador. Sólo hay una oficina técnica en Nueva York. No es suficiente. Tienen que abrirse desde ya por lo menos una oficina técnica en Europa, sugiero Londres por ser sede de la OMI y tener la importancia que tiene a nivel marítimo en esta región y una o dos oficina en Asia, ya sea en Tokio o Hong Kong y todas intercomunicadas por Internet. Pero para hacer esto es necesario invertir. Pensemos en el registro como un ente privado, y démosle la importancia que se merece y los recursos monetarios que necesita para poder ofrecer el servicio esmerado, eficacia y rapidez que el naviero requiere.

¿Qué queremos decir y a dónde queremos llegar?

Panamá como país debe de proteger sus intereses en el registro soberano y no debe dejar que el registro se pare o no avance, o que se dilapide por falta de apoyo. El gobierno y la administración debe de dar ese apoyo al usuario, apoyo que va a costar dinero, pero quien no ha oído el refrán: Dinero llama a Dinero! Hay que invertir en nuestra Administración, hay que crear las nuevas infraestructuras, hay que estar a la vanguardia en tecnología, no podemos todavía ir sellando papeles con el sello de goma como hace 30 años, no podemos ignorar que los tiempos han cambiado y que como dice el refrán, “O corre o se encarama” … no podemos encaramarnos…tenemos que correr y para eso hay que invertir e invirtiendo podremos crecer y seguir siendo no sólo los primeros sino LOS MEJORES, se lo debemos al país, al registro, a la bandera y sobretodo al mundo!.

En el próximo número comentaremos los últimos cambios tecnológicos que el registro de Liberia acaba de implantar, los cuales son muy importantes y respaldan los comentarios que hemos hecho en este articulo sobre la necesidad de invertir para ganar.


©©María Dixon/ISM Shipping Solutions Ltd. – 2001

Una versión editada de este articulo fue publicada en la sección de Mundo Marítimo del El universal, Panamá, 28 de febrero de 2001,con el permiso del autor